Quienes Somos

Soy Paula Sanza Riady, chilena, Ingeniera Civil Industrial, coach en neurociencia y especialista en gestión emocional. Desde hace años acompaño a cientos de personas a liderar su vida, tal como lo hicimos mi marido y yo para hacer realidad nuestro propio sueño: vivir en plena naturaleza y construir un proyecto sustentable en el corazón del Valle de Cochamó.

En el año 2008, en Nueva Zelanda, conocí a mi compañero de vida y aventuras, Pavel Drabina. Nos casamos en 2009 y juntos recorrimos el mundo, explorando lugares que nos marcaron profundamente: India, Nepal, Marruecos… viajes que sembraron en nosotros la idea de crear un espacio en plena naturaleza donde vivir en equilibrio y compartirlo con otros.

Ese sueño tomó forma en el Valle de Cochamó, Chile, donde decidimos construir con nuestras propias manos una casa hexagonal en medio de los bosques nativos, montañas y ríos cristalinos. Así nació La Frontera, nuestro bed & breakfast y proyecto de vida.

Hoy, abrimos las puertas de este lugar a quienes buscan desconectarse del ritmo moderno y reencontrarse con lo esencial. Aquí cada detalle está pensado para que vivas una experiencia auténtica, sustentable y en armonía con el entorno.

Te invitamos a descubrir La Frontera Valle Cochamó: un espacio para descansar, inspirarte y reconectar contigo mismo y con la naturaleza.

Pavel Drabina es checo, periodista y bachiller en estudios medioambientales, y el gran constructor y diseñador de nuestro proyecto de vida.

Juntos recorrimos el mundo buscando el lugar donde crear nuestro proyecto de vida, y finalmente lo encontramos en el Valle de Cochamó. Allí, en medio de montañas y bosques nativos, Pavel transformó nuestra visión en realidad: con sus propias manos levantó nuestra casa hexagonal, en un entorno sin electricidad y con acceso remoto, demostrando que los sueños pueden hacerse tangibles cuando hay pasión y determinación.

Inspirado en la arquitectura japonesa tradicional y en principios de construcción sustentable, Pavel convierte nuestras ideas y vision boards en proyectos concretos, cuidando cada detalle para que La Frontera sea un espacio único, en armonía con la naturaleza.

Nuestros hijos de cuatro patas también forman parte esencial de La Frontera.

Dadunka, nuestra “hija perruna mayor”, es una mezcla de Bullterrier con Akita. Protectora y casi humana, tiene una sensibilidad única para leer las emociones y actitudes de las personas.
Tony llegó solito hasta aquí y decidió quedarse. Es un gran amigo, siempre dulce y cariñoso con todos los que lo rodean.
Terinka, o como cariñosamente le decimos “Terrorinka”, es la guardiana más fiel del lugar y la más protectora de la familia.

Ellos son nuestros tres hijos perrunos, una parte maravillosa de nuestra vida